El comercio bilateral entre Perú y China crecerá entre 12% a 14% el próximo año impulsado por la minería (desarrolló de Las Bambas y Toromocho) y por las exportaciones no tradicionales, en especial, por los productos agroindustriales como la tara y la maca cuya demanda en el país asiático es casi ilimitada, proyectó Ernest & Young (EY).
Para este año, en cambio, proyecta que la relación bilateral termine en US% 16,000 millones, similar al alcanzado el 2015.
¿Podría crecer más? Si explotáramos en mayor medida el tratado comercial suscrito entre Perú y China hace siete años, el comercio bilateral entre ambos países podría alcanzar al que tiene el gigante asiático con el vecino Chile, que el último año termino en US$ 25,000 millones.
Paulo Pantigoso, autor de la “Guía de Negocios e Inversión Perú – China”, dijo que existe una gran oportunidad para llegar a ese camino, si se desarrolla la oferta agroindustrial con miras a alimentar a un mercado compuesto por 1,300 millones de personas.
“Si se analiza las partidas arancelarias entre Perú a China, la relación es 10 veces más partidas que vienen al Perú que las que exportamos, eso significa una oportunidad importante para diversificar nuestros productos, con miras a explorar un mercado de 1,300 millones de chinos. Se requiere, en esa línea una política de estado para fomentar más la exportación agrícola, para tener así una oportunidad interesante de expandirnos y llegar a los US$ 25,000 millones de Chile”, explicó el representante de Ernest & Young.
Fuente: Gestion
¿Qué productos agroindustriales demanda el mercado chino? Al respecto, Pantigoso precisó que tienen una gran posibilidad de desarrollo las frutas, los granos y algunos productos oriundos como la Tara y la Maca, que han tenido en el último año un extraordinario crecimiento.
Se suma también algunos productos marinos como el pescado fresco y todos sus derivados como la pota, los langostinos, entre otros ricos en nutrientes y que son queridos por los asiáticos.
Una prueba del alto potencial de este sector es que las exportaciones agrícolas a China pasaron de US$ 3,000 millones el 2000 a US$ 6,500 millones el 2016, es decir, creció 22 veces en 15 años.
Otros sectores que también apuntan al crecimiento del comercio entre ambos países son la minería, al ser el principal consumidor de minerales como el cobre y el turismo, que debería mirarse con cuidado como otro rubro para atraer inversionistas chinos.
El especialista considero vital para incrementar el comercio bilateral, también una mayor participación de Perú en las grandes ferias que se desarrollan en China con miras a tener una mayor figuración en los foros donde ese capital apunta anclar como en energía, agroindustria, infraestructura y otros.
“Perú destaca porque tiene la materia prima para producir los bienes y servicios que demandan, pero tiene que estar presente en aquellos lugares donde los demandantes chinos acuden. Con una presencia más frecuente y decidida, nuestras exportaciones tendrá un mayor valor”, explicó.